El caso del juego para dispositivos móviles Flappy Bird es bastante especial. Su creador, Dong Nguyen, natural de Vietnam, creó el juego simplemente para ver lo que podía hacer. Pero unos meses después de llegar a la App Store se convirtió en un éxito de la noche a la mañana, causando gran adicción entre una gran parte de los que se lo descargaron.
Decenas de miles de dólares después, ganados mediante la publicidad dentro de la aplicación, decidió retirarla por que su conciencia no podía soportar que hubiera gente terriblemente enganchada al juego. La retiró de las tiendas de aplicaciones y continuó con su vida. En el entretiempo, hubo gente que incluso intentó vender iPhones con el juego instalado (eliminarlo de la App Store no lo elimina de los dispositivos), aunque eBay evitó esas subastas.
Situándonos ya a mediados de marzo, el creador del juego aseguró que volvería a la App Store y Google Play, pero cambiado para que fuera más llevadero para su conciencia. Cosas de los vietnamitas, supongo. Y ya situándonos en el presente, Nguyen ha anunciado que volverá en agosto como un juego multijugador menos adictivo. Aunque también habrá otros modos de juego, por lo que igual no va a conseguir su objetivo de no ganar 50.000 dólares en publicidad al día. Veremos.
Una última cosa: también ha mostrado un avance de un próximo juego que va a lanzar, y del cual sólo hay la siguiente imagen.
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